La relación entre móvil y cáncer ha sido uno de los temas más preocupantes de los últimos años. No en vano se ha profundizado más en ello debido a varios estudios. Todos sabemos que desde hace unos años, el uso del teléfono móvil se ha convertido en algo más que habitual.
Es por ello que las alarmas saltaran debido a la frecuencia de dicho uso, así como a las redes Wifi o bien, radiofrecuencias. La tecnología se ha metido de lleno en nuestra vida pero, ¿existe una relación directa entre el uso del móvil y el cáncer?. ¡La respuesta es bastante contundente!.
Resultados de los estudios sobre la relación entre móvil y cáncer
No ha sido ni uno ni dos, sino que son numerosos los estudios que se han llevado a cabo en relación a este tema. Todos ellos cuentan con varios años de investigación tras de sí. Un primer estudio tuvo lugar durante dos años. En él más de dos mil animales estuvieron expuestos a la radiaciones de los móviles y demás aparatos. Parece que como resultado, algunos de los animales macho sí generaron ciertos tipos de tumores cerebrales. Algo que no sucedió lo mismo ni en hembras, ni tampoco en crías. Así que, el estudio no terminó de una manera concluyente, sino con más preguntas sin una respuesta concisa.
Otro de los estudios, ya en humanos, se centraba en el tiempo del uso de los móviles. Parece que los resultados eran similares a los anteriores. Las personas que pasaban muchas horas al teléfono eran más propensas a padecer algún tipo de tumor, pero no fue una teoría totalmente demostrable. Más que nada porque para que hubiera un riesgo bastante alto, habría que pasarse todo el día pegado al teléfono.
Un estudio danés es quizás, el más exhaustivo en este terreno. Se trataba de investigar si en el tiempo de 18 años, los titulares de las líneas de móviles tendrían más riesgos de desarrollar la enfermedad. A la hora de hablar de algún tipo de conclusión, parece que a largo plazo no había una gran diferencia entre los usuarios que tenían móviles desde hacía tanto tiempo, como los de menos.
Resultados de los efectos del móvil en mujeres
Parece que en ocasiones, también hay que leer la letra pequeña de estos estudios. Aunque no se han encontrado factores que indiquen que por usar el móvil tenemos disposición a padecer enfermedades, sí que encontraron algo bastante destacable. Las mujeres que habían usado el móvil durante unos cinco años, tenían más riesgo de padecer un tipo de tumor de carácter benigno. Aunque como dicho tumor es algo poco común, se pensó que hasta podría ser una casualidad. De ahí que no le hayan dado más importancia.
Estudios que no coinciden entre la relación del móvil y el cáncer
Como vemos, ninguno de ellos cuenta con una conclusión concisa y menos que concuerde con la anterior. Son muchos los estudios realizados, pero hasta el momento parece que ninguno de ellos arroja datos demasiado coincidentes. Cuando se elaboran los estudios, no siempre los datos base son los más correctos. Quizás las propias personas a las que se les hacen algunas preguntas, no siempre contesten de manera correcta. Más que nada porque no todos recordamos el tiempo o el momento en que pillamos un móvil por primera vez. Otras veces, las coincidencias entre la enfermedad y el uso del móvil se dan más de lo que podamos pensar. No por ello los dispositivos son los culpables de ello. Además, hay que decir a su favor que los primeros teléfonos móviles emitían unas ondas más energéticas. Pero los que tenemos hoy en el mercado, ya llevan una energía menor. Además, sabemos que hoy en día le damos otro usos gracias a los diversos programas de mensajería. La importancia es no estar muchas horas con el móvil cerca de la cabeza.
Conclusiones finales
La relación entre móvil y cáncer sigue siendo un tema de discusión. Seguro que más adelante continuarán sacando estudios que puedan arrojar alguna luz. Pero hasta el momento, por mucho que se haya hecho ya, se puede decir que no hay una relación entre móvil y cáncer directa. Por lo menos, no confirmada. Por mucho que se puedan dar casos de dicha enfermedad en algunas personas que usan el móvil con frecuencia, no determina que éste sea el problema en sí.
Según parece los mitos y las leyendas se han apoderado de la población. Algo que también se considera normal visto el incremento de casos de cáncer. Pero con el fin de no generar más pánico, podemos usar libremente el teléfono sin pensar en que nos emite unas u otras ondas perjudiciales.
Después de casi tres décadas usando estos dispositivos, no se tienen unas evidencias claras de que sean los culpables. Aunque parece que la población no lo tiene todavía tan claro. Siempre se ha supuesto que era el cáncer cerebral el que sería el principal desencadenante de este peligro. Pero son muchas otras causas que pueden derivar, por desgracia, en esta enfermedad. Por lo que ninguna de ellas es la que nos lleve como pista hasta los teléfonos móviles.